El pasado 15 de octubre celebramos en nuestro Centro el Día del Domund (Domingo Mundial de las Misiones). El Domund es una jornada en la que, de manera especial, toda la Iglesia universal reza por los misioneros y colabora con las misiones. Se celebra en todo el mundo el penúltimo domingo de octubre, que este año será el 19 de octubre de 2025, dentro del llamado “mes de las misiones”.
¿Qué es el DOMUND?
El Domund (Domingo Mundial de las Misiones) es el día internacional en el que toda la Iglesia se une en oración y solidaridad por la labor misionera, organizando una colecta para apoyar esta causa. En esta jornada se recuerda que todos los cristianos formamos parte activa de la misión evangelizadora de la Iglesia.
¿Quién participa?
Todos los cristianos estamos llamados a implicarnos en la misión de la Iglesia. No se trata solo de los misioneros, sino de todos nosotros, que debemos colaborar y participar de diferentes maneras. Cada cristiano está llamado a ser misionero y testigo de Cristo en su entorno.
Durante la semana, los alumnos y alumnas, junto con el profesorado, trabajaron en las aulas el lema de esta jornada: “Misioneros de esperanza entre los pueblos”.
Por la tarde, pudimos disfrutar de la ya tradicional merienda solidaria, un encuentro muy especial en el que toda la Comunidad Educativa —alumnos, familias y profesores— compartimos un momento de convivencia. Además, participamos en el Mercadillo Solidario, en el que se vendieron las manualidades elaboradas con esmero y cariño por cada clase durante los días previos.
Queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento a todos los que colaboraron: alumnos, padres, antiguos alumnos y profesores. De manera especial, destacamos la ayuda de los alumnos de 4º de ESO, cuya implicación hizo posible el éxito de la jornada, y también la participación del antiguo alumno Kilihan, que una vez más encontró un hueco en su apretada agenda deportiva para sumarse a esta causa solidaria. Le deseamos la mejor de las suertes en la temporada actual.
La tarde se desarrolló en un ambiente familiar, solidario y lleno de alegría, compartiendo lo que tenemos con quienes más lo necesitan.
Padre bueno, haznos «gente de primavera»,
con una mirada siempre llena de esperanza
para compartir con todos.
Ayúdanos a mantener encendida
la llama de esa esperanza,
para que se convierta en una gran hoguera
que ilumine y dé calor
a un mundo abrumado por densas sombras.
Te pedimos por los misioneros y misioneras
que, siguiendo tu llamada,
han ido a otras naciones para dar a conocer
el amor que nos has tenido en Cristo.
Haz de ellos y de todos nosotros
misioneros de esperanza entre los pueblos,
impulsados a acoger, como Él y con Él,
el clamor de la humanidad.
Te lo rogamos por medio de María,
Madre de Jesucristo, nuestra esperanza.
Amén
A continuación les mostramos imágenes de los diferentes momentos vividos: